Vecinos ladrones y falta de profesionalidad
Hoy no voy a hablar de belleza, sino que solamente voy a contar algo que me ha sucedido, más que nada por desahogarme y compartir la experiencia.
El otro día hice un pedido de unas camisetas en una página Web. El envío era por mensajería (SEUR) y yo indiqué la dirección de mi trabajo para que me los entregaran ahí. Sin embargo, desde la empresa se confundieron y pusieron como dirección de envío la de facturación, que es mi casa. Hasta ahí, nada grave, somos personas, como tal cometemos errores y eso nos puede pasar a todos. Pero cuando juntas un simple error humano con una serie de malas prácticas tanto morales como profesionales, pasan cosas como la que me ha sucedido a mí.
Después de ver en la página de seguimiento de Seur que mi paquete ya había sido entregado (cuando yo no había recibido nada), me pongo en contacto con Seur, pero después de pasarme por mil números no fueron capaces de darme ninguna información, ni siquiera con el número de seguimiento. Solamente se limitaron a decirme que esperara al día siguiente...
Así que, por el bien de mi saalud mental, desistí de Seur y me puse en contacto directamente con la tienda, que es cuando me informan de que por error se me envió el paquete a mi domicilio. Lo más fuerte viene cuando ellos a su vez se ponen en contacto con Seur y descubren que en repartidor ha entregado el paquete en otra casa que no es la mía.
Ese mismo día, al llegar a casa, esperé que alguien me hubiera dejado una nota en el buzón, o debajo de la puerta, informándome de que tenían mi paquete (que es lo que haría yo u otra persona con un mínimo de decencia), pero nada. Dejé una nota en el portal haciéndolo saber y pidiendo a quien hubiera recibido mi envío, que se pusiera en contacto conmigo.
Dos días después, seguía sin tener noticias. Alguien se quedó mi paquete y se quedó tan pancho. Los de la tienda online, que han sido muy atentos y se han preocupado por este asunto en todo momento, me pidieron disculpas, asumieron su error y volvieron a enviarme las camisetas.
Por su parte no tengo queja, un 10. De Seur pocas cosas buenas puedo decir, solo sé que, a instancias de la tienda, el repartidor volvió a mi bloque y trató de ponerse en contacto con el vecino al cual entregó mi paquete, pero no encontró a nadie.
Lo que me choca realmente de este incidente son dos cosas. Primero, ¿cómo un profesional entrega un paquete sin comprobar ni la dirección ni la identidad del destinatario? Sólo eran unas camisetas, pero ¿y si fueran documentos importantes o algo urgente? Y segundo, con respecto al vecino caradura, ¿qué clase de escrúpulos puede tener una persona que recibe un paquete que no ha solicitado, lo acepta y se lo queda, aún sabiendo que pertenece a otra persona? Esta persona tiene que haber visto mi nombre escrito en el sobre y aún así le ha dado igual.
Un error lo puede tener cualquiera, como les sucedió a los responsables de la tienda online. El repartidor también cometió un fallo muy gordo, aunque desconozco si sus propias condiciones de trabajo han sido las que le han impulsado a no tener el suficiente cuidado. Pero lo del vecino que se ha quedado mi pedido clama al cielo directamente. Me da impotencia que en este país se robe tanto, comenzando por los propios políticos y acabando por tus propios vecinos, que cuando no te roban wi-fi te roban tus paquetes. Me da mucho asco que exista gente así...
¿Os ha pasado algo parecido alguna vez?
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