Ahora ya comprendo todo...
Esto es un frasquito del disolvente para esmalte de uñas de Mercadona:
Como podéis ver, el envase tiene una boquilla horrorosa e incómoda para usar ya que para que caiga el producto tienes que ponerla casi completamente boca abajo y además desperdicia mucho producto (yo nunca he atinado a echar dos o tres gotas en un frasco de esmalte sin armar un estropicio o verter medio frasco)Aquí está la culpable:
Por eso decidí quitar la puñetera boquilla y usar el frasco con un viejo cuentagotas, me era mucho más fácil y práctico.
Siempre me pregunté por qué demonios habían puesto ahí esa pieza tan odiosa e incómoda. Hoy fui a abrir el frasquito para aligerar un esmalte que se me había espesado y me encontré con esto:
¿Véis algo dentro? Porque yo no. La última vez que lo usé (hace una o dos semanas) el frasquito estaba por la mitad. Imaginaos la cara de culo que se me quedó cuando constaté que el frasco estaba completamente vacío. No sé si se evaporó o se vertió, pero ni una gota quedaba, nada, niente, rien, nothing!
Y ahora es cuando he comprendido la finalidad de ese horroroso tapón que tantos dolores de cabeza me daba, pero que impedía que se evaporara el producto...Arrrghhh, no sabéis qué rabia me ha dado, me han entrado ganas de darme una patada en el culo a mí misma, por bruta.
Necesito otro disolvente YA MISMO, lo malo es que se ha puesto a llover y no me apetece ir al Mercadona ahora mismo...
Aprendan de mis errores, chiquillas